viernes, 7 de diciembre de 2012

SOBRE LA CONSTITUCIÓN Y SU REFORMA



Ayer celebrábamos el 34 aniversario de la Constitución española de 1978, celebración que si no hubiera sido por la Concentración organizada por DENAES en Madrid y por la organizada en Barcelona por la plataforma Movimiento Cívico España y Cataluña, hubiera estado bastante descafeinada, pues el acto oficial, en palabras de algunos periodistas, fue bastante “cutre”. Además este año el mismo se ha desarrollado en la Plaza de la Marina Española, sede del Senado, pues el Congreso de los Diputados está de obras.

Muchos de los políticos que han desfilado por la recepción oficial se han dedicado a decir lo mismo que siempre, “que la Constitución goza de buena salud”, “que representa la unión de todos los españoles”…, vamos, lo que se dice siempre en estos casos, como cuando se visita a un familiar mayor, enfermo, y le dices que lo ves con buena cara, que lo ves sano, cuando en realidad piensas lo contrario.

El Presidente del Gobierno, Sr. Rajoy, dijo entre otras cosas que “la Constitución está plenamente vigente y fija unas reglas del juego claras”; por su parte el Secretario General del PSOE, Sr. Pérez, sí habló de modificar la Constitución, para adaptarla a los “nuevos tiempos”, entre otras cuestiones incluir el derecho a la salud como derecho fundamental.


La Constitución precisa de una reforma importante, igual que se está haciendo con el Palacio de la Carrera de San Jerónimo  Hay que arreglar las cubiertas de la Carta Magna, pues está haciendo aguas por muchos lados. No hay que tener miedo a refundar el Estado.

Creo que la reforma que precisa la Constitución no será realizada por los actuales partidos políticos principales, PP y PSOE, al fin y al cabo pertenecen a la casta y viven muy bien en el Sistema. En mi opinión la reforma de la primera de nuestras leyes ha de versar sobre las siguientes cuestiones:
  • Reforma del Sistema electoral. Listas abiertas y circunscripciones más pequeñas.
  • Eliminación del Senado.
  • Cambios en la estructura territorial del Estado. Eliminación de Comunidades Autónomas o, en su caso, constitución formal de un Estado Federal.
  • Delimitación de las competencias exclusivas del Estado, educación y sanidad entre ellas.
  • Eliminación de las Diputaciones y de las demás organizaciones intermunicipales (mancomunidades y demás).
  • Fusión en un solo municipio de las poblaciones integradas en Áreas Metropolitanas y fusión de municipios menores de 1500 habitantes.
  • Independencia real del Poder Judicial respecto al resto de poderes del Estado. Elección de sus dirigentes por parte de la población o de los profesionales de la Justicia.
  • Elección directa del Presidente del Gobierno por parte de los Ciudadanos.
  • Eliminación de los aforamientos para representantes públicos.

Seguramente me falten algunas, espero vuestras aportaciones, y en otras cuestiones haya sido muy ambicioso o idealista. Solo creo que es necesario cambiar la Constitución, adaptarla a las nuevas necesidades. Hacer una España más transparente y más cercana a la ciudadanía, además, si queremos más Europa tendremos que reformar nuestra estructura de País, para adaptarnos a las futuras situaciones. Lógicamente nadie me hará caso, pero ahí quedan las propuestas, para que luego digan que no hay ideas

2 comentarios:

  1. Por fin veo un artículo digno donde se ataca problemas reales, donde no se hace propaganda de un partido, donde se escribe para hacer de verdad lo que pone en tus datos personales.
    Mi enhorabuena por estas palabras.

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  2. Querido Angel, en los asuntos que consideras que deben considerarse en una reforma de la constitución, que respaldo plenamente, has olvidado, supongo que involuntariamente, la cuestión monarquía o república.
    En cuanto a quien ha de poner el collar al gato, te has quedado corto... muy corto. No es que los partidos no van a hacer los cambios, sino que van a defender con uñas y dientes para que se mantenga el estatus quo. Solo una acción contundente de la sociedad civil podría debilitar la oposición de los partidos a la necesaria reforma constitucional.

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