El jueves se publicaba la Encuesta de Población
Activa (EPA) y, como siempre, ha habido opiniones para todos los gustos. A unos
les parecen datos prometedores, que demuestran que nos encontramos en el buen
camino; sin embargo, para los contrarios, estos datos demuestran que la cosa
sigue sin funcionar y que las políticas de este Gobierno no mejoran la
situación.
Sea lo que sea, se opine lo que se opine, lo que
queda claro es que la provincia de Córdoba es la segunda con más paro de este
País, por detrás de Cádiz. Un drama que sufrimos todos los cordobeses, que
vemos como la falta de trabajo, de empresas y de futuro asola nuestra tierra.
Y lo más triste, como comentaba ayer en El Día de
Córdoba, es que creo que no se pondrá solución a este cáncer en los próximos
años porque nos falta el mimbre, porque carecemos de políticos capaces y de
empresarios (aunque haberlos haylos, gracias a Dios...). Y hablando de Dios, no
espero que la Virgen del Rocío o Santa Teresa vengan a salvarnos de esta lacra
que es el paro, aunque a muchos la desesperación les lleve a confiar solo en
las divinidades.
Digo que carecemos de políticos capaces, y
precisamente ayer hablaba de esta cuestión nuestro amigo ‘Empresario del 9
largo’ en su artículo sobre la ley de emprendedores, porque da la sensación que las leyes en España se hacen
contra, a mala leche…
De la izquierda española mejor ni hablar, porque
han demostrado que no saben crear empleo y riqueza, que no tienen capacidad
para desarrollar y modernizar un territorio, aquí tenemos el ejemplo de Andalucía,
que tras más de treinta años de gobierno socialista sigue a la cola de casi
todas las estadísticas. Pero es que la derecha últimamente también deja mucho
que desear, da la sensación que los del Partido Popular se han convertido en
burócratas cuyo único objetivo es reducir el déficit, a toda costa, cueste lo
que cueste, aunque para ello tengan que ir contra sus principios económicos más
elementales. Y así nos va…
Y si nos referimos a las políticas municipales,
¿qué puede hacer un ayuntamiento para acabar con el paro?, pues en mi opinión
limitarse a ayudar al empresario, dar facilidades al emprendedor, pero de
verdad. Facilitando el papeleo, regalando suelo industrial y sobre todo no molestando
a las empresas e intentando atraer inversores. Poco más se puede hacer, salvo
fomentar la formación y cualificación profesional de los parados.
Y si queremos crear empleo hemos de contar con los
empresarios, pero empresarios de verdad, no meros cazadores de ayudas y
subvenciones. Los empresarios anclados al sistema, que han hecho de este su
forma de vida, han de desaparecer. Necesitamos personas dedicadas a su empresa,
a sus ideas y no a salir en fotos y a dejarse ver en ‘chuchipandas’. Solo con
empresarios de verdad podremos salir de esta.
Que se apliquen el cuento que la situación es muy
grave. Hay que cambiar muchas cosas, ¿empezamos?
Casualmente las 2 provincias son del PP, que aunque no sirve de nada que lo diga, antes cuando pertenecía a IU se ponía esa coletilla. Yo he dicho en mas de una ocasion y creo que así sera, que necesitamos un cambio de raíz (radical) para poder cambiar esto. Como ya nos a enseñado la historia eso solo lo puede hacer el pueblo. Hasta que el pueblo no este unido, no hay nada que hacer. Por eso creo que tardaremos muchos años. Si hay buenos políticos en este país, solo que el pueblo tiene que estar encima de ellos para apoyarlos en los momentos que la Troika nos quiera quitar algo, o bien para decirle al político que te quitamos a ti.
ResponderEliminarLo lamentable que se ve un ministro evocando a espíritus eclesiásticos o entes paranormales solo demuestra la ineptitud, o bien la falta de poder para cambiar las cosas.
Otra vez la mula al trigo. Me podéis decir que decisión política a tomado el PSOE en cuestión de economía que sea de izquierdas. Decirme alguna, ahora se ve un poco presionado por IU y saco la expropiación de viviendas a los bancos, que por cierto como siempre la quiere tumbar el PP. Olvidarse de siglas, mirar los hechos que es por lo que un partido o equipo demuestra su validez.
Podemos empezar por nosotros como he dicho en no poner etiquetas falsas a los partidos, es como llamar populares a los que nos gobiernan cuando las políticas las hacen en contra del pueblo.
Así que empecemos por nosotros que hasta que nosotros no cambiemos no cambiara ni haremos que cambie.
Viendo cual es nuestra situación y cuales son nuestras aptitudes, solo me queda decir que Dios nos libre, o mas bien virgencita que me quede como estoy.
Esta entrada empieza por definir la incapacidad de los distintos niveles de la administración pública para crear puestos de trabajo, para echársela a las espaldas a un empresariado que no logra encontrar, por unas causas u otras, el cauce adecuado de demanda de bienes o servicio que le permita mantener el nivel de desarrollo y crecimiento que España necesita para paliar el paro.
ResponderEliminarLa duda desde mi blog es mucho más profunda ¿Por cuanto tiempo logrará la sociedad mantener el nivel de crecimiento que necesita para garantizar el pleno empleo? ¿Habremos llegado al punto en que la burbuja crecimiento ha llegado al punto de estallido? Sugiero leer esta entrada: http://lecheybananas.blogspot.com/2013/04/ni-contigo-ni-sin-ti.html
La verdad que es muy interesante, pero ten cuidado que te pueden poner como de marxista y rojo diabólico.
EliminarParece que vamos a tener que cambiar las etiquetas. Izquierda y derecha ya no es lo que era; socialismo o comunismo, tampoco... Lo que yo planteo en mi blog es si será posible que la producción mundial siga creciendo o si la falta de materias primas acabará limitándolo algún día.
EliminarPero Rafael si yo estoy de acuerdo contigo (si me permites que te tutee) el problema de muchos es que o defiendes este sistema capitalista o eres un rojo diabólico que quiere traer lo el sistema soviético, y que conste que no estaba de acuerdo con el sistema que se creo en Rusia. Ya te he dicho en muchas ocasiones que no estoy de acuerdo con ninguno de los 2 sistemas pero vamos a crear alternativas, en vez de defender un pastel el cual no se le pueda dar mas particiones, por ser finito.
EliminarLa realidad está cambiando demasiado deprisa como para renunciar a según que cosas, en función de unas definiciones que pueden ser obsoletas.
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