martes, 8 de septiembre de 2015

EL SINGULAR PEDRO Y EL PLURAL ARTURO, por @AntoniodlTL

Hoy en Desde el Caballo de las Tendillas contamos con una nueva colaboración de Antonio de la Torre, que se limita a poner las cosas en su sitio, nada más y nada menos, y nos da un importante repaso a la historia de nuestra España.


En esta primera semana del curso político, que se adelantó a mediados de Agosto por la presentación de los Presupuestos Generales del Estado, acortando las vacaciones de sus señorías y que tanto ha dado que hablar por las cartas de Alfonso Guerra y Felipe González dedicadas al plural don Arturo Mas (ahora son cuatro los partidos que han formado ‘Juntos por el Sí’) y su “movimiento nacional-separatista”, nos sale el Secretario General del PSOE con su reconocimiento de la “singularidad” de Cataluña.

¿Qué entenderá el cada vez más “singular” Sánchez -acabará solo- por singularidad? ¿Por qué tiene que ser Cataluña singular y no el resto de las regiones de España? ¿O no es singular, por ejemplo, Murcia que, por tener, tiene hasta su particular “idioma” panocho, con su diccionario y todo, y que, además, fue Reino? O Valencia, Galicia, Navarra, Asturias… todas ellas reinos, lo que nunca fue Cataluña y algunas, también, con lengua propia, una de las características “diferenciales” a las que alude el que, después de perder las vocales, perderá más pronto que tarde ese puesto al que nunca hubiera llegado en un país que premiara la excelencia. O Andalucía, que albergó durante siglos el Califato de Córdoba, por no citar cualquier otra de nuestras regiones, todas ellas singulares dentro de una españolidad común a todas ellas.

Mire usted, Sr. Sánchez -también válido para don Arturo- la única “singularidad” por la que se ha distinguido en los últimos años esa Cataluña nacionalista, que usted pondera, ha sido el reiterado incumplimiento de la legislación del Estado y de las sentencias de sus Instituciones (Tribunal supremo y Tribunal Constitucional) y, hasta en eso dejará de ser “singular” porque el mal ejemplo cunde con rapidez si no se ataja y corrige a tiempo y nuestro Gobierno Nacional parece reacio a mostrar la energía necesaria, por lo que las réplicas en otras regiones están a la vuelta de la esquina.

Me cuesta creer que un profesor universitario -como usted se precia de ser-, no catalán (en el sentido catalanista del término, porque hay muy buenos catalanes, la mayoría) caiga en la artificiosidad de los supuestos “derechos históricos” que algunos quieren fundamentar en una historia inexistente y manipulada.

Como nunca es tarde para aprender o recordar algo, como presumo será en su caso, y sin ánimo de ser exhaustivo le voy a dedicar unas pequeñas observaciones, Sr. Sánchez, que también le pueden valer a su ponderado don Arturo.

Hispania, que incluía la actual España y Portugal, es nación 200 años antes de Cristo, por obra de Roma, que la dividió en Provincias por pura “conveniencia organizativa” y no por razones étnicas ni culturales. Y así fue durante seis siglos. Tarragona, no Barcelona, fue mucho tiempo capital de gran parte de la Hispania romana. Lo mismo puede decirse de Vascongadas (me niego a llamarlo País Vasco) a las que en su antigua denominación romana de Vasconia, también se ha atribuido una cierta idea de aislamiento, totalmente falsa, puesto que también los romanos se asentaron en sus tierras, existiendo referencias de que el euskera tuvo influencia del latín.

Posteriormente, los Visigodos, a partir del Siglo IV, consolidaron la Hispania romana, de la que asumieron religión, lengua, Derecho, estructura administrativa y UNIDAD política, hasta que en el Siglo VIII se produce la invasión de los bereberes por el Sur y la posterior conquista de España, propiciada porque Don Rodrigo andaba por Navarra, batallando contra los vascos que apoyaban como Rey de España a Witiza. Esta invasión islámica es la que origina la fragmentación de la unidad nacional de España de nueve siglos, que no se supera hasta finales del siglo XV, con los Reyes Católicos.

Dicho lo anterior y como no pretendo escribir un libro de Historia –cosa que además no podría hacer con rigor, dados mis limitados conocimientos al respecto-, los emplazo a que refresquen sus datos –los de verdad- sobre la Guerra de Sucesión, en la que, como sin duda sabrán, el Reino de Aragón, con Cataluña a la cabeza, no se sublevó contra Felipe V por razón de la autonomía sino a favor de otro Rey de España y por eso proclamaron a Carlos de Austria como “Carlos III, Rey de España y Conde de Barcelona” en 1705, por lo que Felipe V, que ganó esa guerra, primero abolió los antiguos Fueros de Aragón y después promulgó los Decretos de Nueva Planta. Por cierto que ni Lérida ni Gerona se alinearon con los austriacos y la misma Barcelona fue bombardeada primero por las tropas del archiduque Carlos y después por las de Felipe V. O sea que, ni eso, Sr. Sánchez/Mas, justificaría esa “singularidad” y oposición histórica.

Es cierto que hubo otros intentos secesionistas de vuelo corto en los dos periodos republicanos de nuestra historia más contemporánea, pero es a partir de nuestra Constitución de 1978, la que paradójicamente nació con espíritu conciliador, cuando, pasito a pasito, se viene consumando la consolidación de esta pretendida ruptura nacional-separatista propiciada fundamentalmente por aquel “Aprobaré lo que venga de Cataluña” de Zapatero a Maragall, antes de las elecciones de 2004 y potenciada por los dos periodos de gobierno bajo su presidencia y no lo es menos que el Sr. Rajoy, enfrascado en resolver la crisis económica a costa fundamentalmente del contribuyente, parece que no ha prestado demasiada atención, hasta ahora, un poco, a los incumplimientos y desafíos generalizados del Sr. Mas y sus adláteres, desde su concepción particular del “derecho a decidir” que nuestras Constituciones, desde la de Cádiz, siempre han atribuido al pueblo español en su conjunto y no a una de sus partes.

Ahora, repentinamente, como si se hubieran “caído del caballo”, como San Pablo en su persecución a los cristianos, pero, eso sí, sólo un poquito, no sea que se enfaden demasiado sus amigos del Grupo PRISA, últimamente “amigo” de nuestra Vicepresidenta del Gobierno -que se prepare para la dentellada-, también Guerra, primero, y González, después, más “abuelo Cebolleta” que nunca, como si no hubieran tenido nada que ver en el desaguisado autonómico, tuvieron un rapto de “patriotismo” y reconvinieron al cacique catalán apelando a la aplicación del artículo 155 de la Constitución, llamando incluso “pusilánimes” a los que reniegan del mismo y calificando la conducta del Gobierno como un “monumento a la cobardía”. Todo ello en la línea que Merkel y Cameron, mucho más contundentes, marcaron también en esta primer semana de curso político, con un serio aviso a las pretensiones totalitarias y excluyentes de don Arturo, el “ahijado” del patriarca Jorge Puyol Solé y sucesor a título de “hereu” de sus tropelías porcentuales.

En fin, que el verano se despide “calentito” y el Otoño se presenta animado, con un preaviso de convocatoria de las próximas elecciones generales para los días 13 o 20 de Diciembre. Yo recomendaría el 13 ya que es la festividad de Santa Lucía, patrona de los invidentes, con el ruego de que “abra los ojos” a algunos cegatos de la “España visceral” porque la que se avecina, si se vuelve a producir la pinza municipal con el PSOE que se vende a cualquiera y el abanico de ultraizquierda y nacionalistas dispuestos a sacar tajada de su debilidad, puede llevar a una situación prebolivariana irreversible.

1 comentario:

  1. Volvemos con la cortina de humo que llena los periódicos de cosas que al final no solucionan en nada la vida de los españoles.

    Es que no aprendemos. Con razón nos estamos cayendo a pedazos.

    ResponderEliminar