Los
socialistas llevan cuarenta años haciendo de la educación y la sanidad la
bandera de sus políticas en Andalucía, venden una gestión eficaz y cercana a la
gente, pero nada más lejos de la realidad, en realidad la Junta de Andalucía
hace aguas y cada día salen a la luz más carencias.
Ayer,
concretamente, la prensa publicaba que Andalucía ha perdido 863 camas de
hospital entre los años 2014 y 2015, pasando de 15.391 a 14.528. Y lo mismo
ocurre en la provincia de Córdoba, como no podía ser menos, donde se ha pasado
de las 1.800 a las 1.692 camas hospitalarias. Sí, desde el 2015 Andalucía
cuenta con una menor capacidad hospitalaria, con el perjuicio que eso conlleva
para los andaluces; y si encima a eso le sumamos el cierre de plantas de los hospitales
durante las épocas vacacionales, principalmente en verano, uno se da cuenta del
maltrato que dispensa Susana Díaz y su gente a los que les pagan el sueldo. Algo
de lo que los andaluces se están dando cuenta, ahí están las mareas blancas
tomando las calles pidiendo una sanidad digna para Andalucía.
Por
eso, escuchar a los líderes del PSOE en Andalucía hablar de políticas sociales
y de ayudar al más necesitado suena a risa, porque su nefasta gestión está
llevando a que cada día existan menos camas hospitalarias, por no seguir con el
tema de las aulas prefabricadas en tantos colegios…, pero hoy no toca hablar de
eso.
Y ahora encima tenemos que aguantar a una Presidenta de la Junta de Andalucía que, en realidad, no quiere estar en esta tierra, pues ella lo que quería era mudarse a Madrid; por lo que la pregunta es obvia, ¿por qué se va a preocupar de las camas hospitalarias o de las aulas prefabricadas?, eso a Susana Díaz ya se le ha quedado pequeño, ella piensa en otra cosa…
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