Tener el despacho
profesional en la calle San Felipe, junto a la Delegación del Gobierno de la
Junta de Andalucía, hace que muchas mañanas sean divertidas, aunque el ruido de
las manifestaciones no permitan en algunas ocasiones la concentración requerida
en mis tareas de abogado. Y eso es lo que ha ocurrido durante estos últimos
meses con la Plataforma Stop Desahucios, que se han reunido casi todas las
semanas a las puertas de la representación de la administración andaluza en
Córdoba para solicitar el acceso de todos los ciudadanos a todos los servicios
públicos y, en especial al agua.
He de decir que sus
concentraciones en la calle San Felipe están bien organizadas, con sus
pancartas, sus megáfonos y sus consignas repetidas una y otra vez, consiguiendo
que las mismas se te metan en los oídos y las repitas durante el día al estilo
anuncio de Vodafone… Sí, yo mismo me he visto tarareando alguna consigna de
Stop Desahucios (algo que no reconoceré en público).
Y ayer lunes celebraron
otra de sus concentraciones y la sorpresa llegó al final cuando el que lleva la
voz cantante, megáfono en mano vino a decir a los asistentes que ya se verían
después de las vacaciones de verano, que volverían en septiembre a dar la murga
a los responsables de la Junta. Vamos, que son activistas de 9 a 2 y que se
cogen sus vacaciones como Dios manda.
Como si en agosto no
hubiera que luchar por los intereses de la gente, como si en agosto el agua y
los suministros básicos fueran gratis… Es lo que tiene ser activista
profesional (como lo era Ada Colau), que se está cotizando a la Seguridad
Social y se tiene derecho a vacaciones. Que digo yo que si los problemas fueran
tan graves estarían manifestándose aunque fuera agosto, porque las cosas por
las que luchan, porque las cosas que denuncian son muy serias como para tomarse
vacaciones.
Pero no, habrá que
esperar a que sea septiembre para que vuelvan a reclamar por los derechos de
los más necesitados. Y seguro que lo hacen bien bronceados…
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