No pretendo hacer una relación de las excusas utilizadas por políticos,
dictadores y demás fauna a la hora de justificar lo injustificable, o de buscar
un chivo expiatorio que explique aquello que carece de todo sentido; pero el
caso es que siempre ha sido así. Imagino que en la antigua Grecia, durante el
Imperio Romano o en la mismísima Al-Andalus era práctica común eso de buscar
excusas, porque la historia se repite y el ser humano lleva cientos de años (o
miles) haciendo lo mismo, una y otra vez.
El dictador Franco, por ejemplo, tenía su “excusa para todo” en la
conspiración judeo masónica, conspiración con la que podía explicar cualquier
fracaso del régimen y cualquier problema que se le planteara. Resulta que eso
del contubernio judeo – masónico – comunista era el origen y explicación de
todos los problemas del franquismo.
Luego llegó la democracia y cambiaron muchas cosas, pero eso de buscar
la excusa en terceros continuó igual. Y esa excusa se encontró en los medios de
comunicación. Siempre, para todos los gobiernos, ha existido una excusa en el
medio de comunicación contrario a su ideología, excusa con la que han tratado
de explicar muchas de las piedras encontradas en el camino.
Y esa es la excusa que también utilizan los partidos más pequeños. Y en
las últimas horas hemos tenido un par de ejemplos. Ahí tenemos a Podemos, que
estos días se ha dedicado a hablar de una campaña mediática orquestada contra
la formación de ultra izquierda, como decía su líder Juan Carlos Monedero.
Pero no solo ha sido la excusa o estrategia del partido de Pablo
Iglesias, también ha sido utilizada por Unión Progreso y Democracia que ha
denunciado una conspiración mediática para promocionar a Albert Rivera en
perjuicio de la opción magenta.
El caso es que el ser humano sigue como hace miles de años, buscando
excusas, buscando un contubernio que explique sus errores, las cosas que le han
salido mal. Y como siempre es más fácil echarle la culpa a un tercero (si es de
nombre casi impronunciable mucho mejor), que asumir responsabilidades y dar la
cara. Y es que de excusas vive el hombre…
No es cuestión de excusas, es algo que se puede ver. Le están sacando cosas que quedan por probar mientras han escondido latrocinio por todas partes.
ResponderEliminarEso si omiten cosas que benefician al ente.