Los sábados recordamos en
Desde el Caballo de las Tendillas, y tras las declaraciones de Cristina Cifuentes,
aunque creo han sido desafortunadas y sacadas de contexto, me han hecho
recordar este artículo de septiembre de 2015, en el que comentábamos la
situación en la que se encuentra Andalucía consecuencia del desgobierno socialista…
Andalucía es la región de
Europa con más desempleo, sí, la última de unas 275 regiones en las que se
divide el viejo continente. Llevamos muchos años ocupando esta posición,
demasiados. Y supuestamente los esfuerzos de las distintas administraciones por
acabar con esta lacra son muy elevados. Son muchos los millones de euros que
cada año se dedican a las llamadas políticas activas de empleo, aunque está
claro que sirven para muy poco, a la vista están los resultados. Y lo sé por
experiencia.
Por eso uno se indigna
cuando lee noticias como la que se publicaba hace unos días. Y es que resulta
que la Junta de Andalucía lleva varios meses (y los que quedan), pagando las
nóminas a unos 50 agentes locales de promoción de empleo, pese a que no trabajan.
Sí, pese a no trabajar.
Pero lo peor no es eso,
lo más grave es que esta situación se podría ampliar a 800 trabajadores, según
informaba El Mundo, que son los que se corresponden con los empleados
despedidos de las Unidades Territoriales de Empleo y Desarrollo Local, despidos
que fueron invalidados por el Tribunal Supremo.
Es decir, Andalucía, la
región europea con mayor desempleo, se permite el lujo de estar pagando el
sueldo de 50 agentes locales de promoción de empleo sin que estos trabajen, sin
que desarrollen políticas activas de empleo, sin que ayuden a los parados
andaluces.
Sinceramente no tengo
mucha confianza en estas políticas de promoción de empleo, porque suenan más a
chiringuito y a publicidad barata y además considero que tienen muy poca
repercusión en la creación de empleo; pero bueno, ¡algo harán!, y prefiero que
estas 50 persones estén trabajando y haciendo algo contra el desempleo que
cobrando por estar en su casa.
A esto se dedica la Junta
de Andalucía, a tener a 50 personas cobrando en su casa cuando se deberían
estar dedicando a trabajar contra el desempleo. Pero no, como siempre la Junta
riéndose de los andaluces. Así nos va.
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