Ayer se extendieron los asaltos a las embajadas de
los Estados Unidos de América por muchos países del mundo islámico, incluso el
embajador americano en Libia fue asesinado. Los enfrentamientos comenzaron
cuando la Policía egipcia intentó desmantelar una acampada junto a la sede
diplomática norteamericana en protesta por un vídeo realizado en EEUU por un
ciudadano israelí-estadounidense -según han informado medios de comunicación de
ese país-, en el que se caricaturiza la figura del profeta Mahoma.
La acampada se erigió después de las protestas del
martes frente a la embajada, en las que varios manifestantes consiguieron
escalar el muro del complejo, arrancar la bandera de EEUU y sustituirla por otra
que decía "No hay más Dios que Alá y Mahoma es su profeta", según
informa Libertad Digital.
Para muchos estos hechos pasarán inadvertidos, a
muchos les da igual que se ataque a las representaciones diplomáticas de países
aliados, y otros hasta pensarán que lo tienen merecido, por ejercer el
imperialismo, por querer ser los “dueños” del mundo.
A mí me preocupan mucho estos hechos y no puedo más que condenar estas actitudes y
mostrar todo mi apoyo al pueblo hermano norteamericano.
Estados Unidos, junto a Israel, está en la primera
línea de defensa de nuestra forma de vida, de nuestra cultura, de nuestras
democracias. Israel por motivos geográficos, es la puerta de las democracias
europeas, es la puerta de que quienes quieren destruir la forma de vida
occidental. Israel da la cara por nosotros y les deberíamos estar agradecidos,
estamos en deuda con ellos.
Y por otro lado los Estados Unidos de América, que
ya en el siglo pasado tuvieron que sacarnos a los europeos las castañas del
fuego por dos veces, y ahora siguen haciéndolo, preservando la democracia y nuestro
estilo de vida.
Lógicamente alguna de sus actitudes, de sus
actuaciones, son criticables, pues aunque miren por los intereses de la cultura
occidental, primero miran por ellos mismos, que para eso son los que más
arriesgan.
Por eso España ha de estar siempre al lado de
Estados Unidos, y al lado de Israel, países hermanos, países que comparten
mucho con nosotros, sobre todo el amor por la democracia y la libertad, aunque
algunos no quieran verlo.