Me
considero un ciudadano comprometido con mi País, por lo que deseo lo mejor para
España, pues también será lo mejor para los míos. Y como ciudadano
comprometido, iluso de mí, siempre he pensado que nuestros políticos son las
personas más comprometidas con España. A fuerza de hechos he caído en la cuenta
de que no es así, que muchos de nuestros políticos dejan mucho que desear y que
se preocupan más por mantener su sillón y estatus que por trabajar y luchar por
la mejora de la colectividad a la que representan.
Y
este análisis lo he desarrollado estos días, con la caída de Bankia. Resulta
que el estado español va a inyectar en esta entidad financiera 23 mil millones
de Euros, por lo que la misma va a pasar a ser de control estatal, pasando a
ser sus dueños todos los ciudadanos.
Y
lo que como ciudadano me molesta es que no se me explique de dónde sale esa ingente
cantidad de dinero. ¡¡23 mil millones de Euros son 3,8 billones de pesetas!!
Como ciudadano tengo derecho a que se me den respuestas. No sé si procede una comisión parlamentaria, no sé si procede la intervención de la fiscalía, lo que si sé que procede es una explicación clara y seria de lo ocurrido, pues hablamos de una cantidad muy importante de dinero y como el dinero público es de todos se ha de explicar muy bien dónde va y por qué va.
No
pretendo que España sea como Islandia, ojalá lo fuera, por eso sólo pido un
poco de transparencia en una cuestión tan importante. Creo que hay que ayudar
al sistema financiero y dejar caer Bankia traería consecuencias imprevisibles
para España, pero las cosas se han de explicar. Los ciudadanos hemos de exigir
explicaciones porque tenemos derecho.