La
corrupción política es un mal endémico de nuestra sociedad, una plaga que se ha
adueñado de nuestro hábitat y que va a ser muy difícil de aniquilar. Desde años
la corrupción está presente en nuestra democracia, y es que la corrupción es
algo consustancial al ser humano, algo inherente a cualquier sistema político,
pero algo contra lo que se ha de luchar. El estado democrático ha de ser
implacable con la corrupción y sus manifestaciones; y da la sensación de que
eso no ocurre en nuestro País.
Aunque
parece que algo está cambiando. No obstante no toda la corrupción se trata
igual. Hay una corrupción de la que se habla menos, que se tiene menos en
cuenta. Tenemos una corrupción de primera división, que acapara todos los
medios de comunicación, que está en boca de todos, como ejemplos más destacados
el caso Gürtel y el caso Bárcenas, entre otros. Y contamos con una corrupción
de segunda, que suena menos, que pasa más desapercibida sobre todo entre el
gran público, ahí tenemos el caso Campeón, con el diputado Blanco al frente, el
caso de los ERE en la Junta de Andalucía o el caso del reparto de cientos de
miles de euros entre amigos del PSOE por parte de la fundación IDEAS, por
ejemplo.
¿Por
qué existe una doble vara de medir?, ¿por qué no se tratan los casos de
corrupción igual? Para mí son igual de condenables unos y otros. Bárcenas ya nos hizo la peineta a todos en su día, pero cada día tengo más claro que esa
peineta era una dedicatoria de toda la clase política a los ciudadanos.
¿Cuánto
tiempo han dedicado los programas de las principales cadenas a la corrupción de
uno u otro partido? ¿Cuánto tiempo le han dedicado a la trama de los ERE, por
ejemplo?
Mientras
no se trate toda la corrupción de la misma forma, mientras todos los corruptos
no sean despreciados por la sociedad, sin que se diferencie según el partido al
que pertenezcan, iremos de mal en peor.
Claro que no se trata a toda la corrupción igual, tú mismo lo haces en tu blog. Sabes que soy un fiel seguidor y sin embargo nunca te he visto hablar de “los sobresueldos metidos en sobres”. Incluso como quitándole importancia a la corrupción institucionalizada. Decías que lo de Barcenas solo era un tipo que había metido la mano en la caja. Todo esto porque eres votante de este partido y lo defiendes o no lo atacas con las mismas ganas que el resto, y creo que ese es el autentico problema.
ResponderEliminarNo haría falta tanta justicia (aunque yo soy el primero que pide que sea más estricta) si en nuestra comunidad, casi nadie fuera votado al PSOE, bien en Valencia si no hubiese votado al PP. En los 2 casos había corrupción institucionalizada (para mí la peor de todas) pero sin embargo consiguen una cantidad de votos muy grandes. ¿Imaginarse que no hubiesen conseguido casi votos? ¿Hubiese cambiado todo? Porque no empezamos con las autocriticas en vez de pedirle a los demás, lo que nosotros no hacemos.
La corrupción es lo que está separando aún más la población de la clase política, porqué evidentemente está en todas las casas (y de todos los colores).
ResponderEliminarEl problema principal, sobre todo para los del PP, es que solo ven la paja en ojo ajeno aunque no ven ni quieren ver la propia (aunque sean vigas de la construcción de su época de la 'España va bien').
Creo que el anónimo ha dado en el clavo. Mientras no dejemos de justificar a "los nuestros" todos ellos seguirán riéndose de nosotros.
ResponderEliminar