Publicamos un nuevo artículo de Jesús Castizo, estamos
encantados de publicar colaboraciones de nuestros amigos, así que ya sabéis,
¡animaos!
Escapa por la ventana o ¿por qué lo llaman piratería
cuando quieren decir avaricia?
Soy un lector asiduo, frecuente, un devora páginas o
más conocido como vulgar “ratón de biblioteca”; unos minutos de lectura nunca pueden
faltarme antes de caer en brazos de morfeo y desde muy joven nunca han faltado
uno o más libros en mi mesilla de noche.
Pero claro, los tiempos cambian, los pisos ya no son
tan grandes como los de nuestros padres (aquellas enormes enciclopedias que por
sí sola llenaba una o más estanterías), ni nuestra hipoteca es tan pequeña y
claro la falta de tiempo y espacio (que además se agrava en caso de esos
pequeños monstruitos más conocidos como hijos) no permite el mismo ritmo de
compra.
Y la tecnología ayuda, y MUCHO!!! Pasar de libro en
papel al libro electrónico, especialmente tras la irrupción de un dispositivo
económico, fácil de manejar y accesible como el KINDLE, resulta una experiencia
maravillosa. No más pilas de libros en precario equilibrio, no más estanterías
abarrotadas ni cajas llenas, la inmediatez de obtener y empezar en pocos
segundos a disfrutar del libro y el ahorro para el bolsillo.
Pero uno también es legal o al menos le gustaría
serlo y que los autores sean justamente recompensados, pero resulta tarea
titánica cuando:
- La mayoría de autores siguen empeñados en vender
papel, son muy pocos los que ponen a la venta sus obras en portales digitales
(amazón.es, casadelibro.com
o similar) a un precio razonable teniendo en cuenta el ahorro en distribución,
almacenaje o intermediarios, resulta absurdo y me niego a comprar la versión
digital casi al mismo precio que en papel (no he tenido problema en comprar en
Amazón obras de autores como José Luís Gámez que si entienden el mercado). Y son menos
los que cuelgan sus obras libremente en su propia página web
confiando en los donativos de los lectores (tampoco he tenido problema en donar
aproximadamente 5 € a autores cuyas obras he descargado y leído por este
método). Resulta además “sorprendente” que tras dirigirte a autores a cuya obra
has accedido por “otras fuentes” pidiéndoles un mecanismo (cuenta de paypal,
cuenta bancaria, etc..) para realizar una donación y compensarles por su
trabajo ni te respondan o lo hagan ignorando completamente la petición (me ha
ocurrido un par de veces), debe de sobrarles el dinero...
- Las bibliotecas públicas están en algunos casos
(como ocurre en mi localidad) totalmente convertidas en salas de estudio
públicas donde no se cuida, ni promueve ni se mima el préstamo de libros,
siendo estos poco más que adornos de relleno, hasta el punto de (anécdota real)
mezclar en una misma sala un DVD de Corto Maltesse, DVDs del gato con botas,
libros infantiles y cómics Marvel (donde literalmente en cierta viñeta un
villano arranca de un mordisco la cabeza de un héroe o se come los intestinos
de otros, visiten este link si creen que
exagero). Además desaparecen mecanismos como el préstamo entre bibliotecas que
te permitía disfrutar de muchísimas obras sin limitarte a tu localidad,
justificarán en que es muy caro, claro que para llenar los bolsillos de las
editoriales con un absurdo, derrochador, faraónico e impracticable sistema de
préstamo digital sí que hay dinero. Bibliotecas que
además pagan religiosamente un canon por préstamo que en teoría (¿de
cuantas sociedades de gestión se han auditado las cuentas en este país?) va a
parar finalmente a manos de los autores.
Señores autores, tengan claro que me encanta, adoro,
me “flipa” leer, que no quiero un “todo gratis”, que se que su trabajo tanto
como el mío tiene su precio, y que estoy dispuesto a pagar, pero por lo menos
denme facilidades, que lamento mucho decírselo la luz, el agua, la cesta de la
compra también me cuestan lo suyo y por desgracia cada día más, yo me apretaré
el cinturón pero les pido ustedes también vigilen el suyo.
Yo sigo fiel al libro de papel, que se puede comprar barato en ediciones de bolsillo y no hace falta pagar a las eléctricas para leerle.
ResponderEliminarSi algún día hay un apagón, en este aspecto, a mi no me cogen.
Yo he llevado muchos libros a la biblioteca de mi pueblo, no le hace mucha gracia a la bibliotecaria...
Yo tengo previsto publicar mis poemas satíricos en cuanto haya volumen suficiente, pero lo haré en electrónico y gratis, porque me ganó la vida con mi trabajo y esto me da a mi más placer ser leido que leerme a quien me lea. Quizás le pase eso mismo a los que no le contestaron. Si algún día (que no llegará nunca) hay tanta gente queriendo leerme que merece la pena entrar en otros temas ya veremos pero así lo haré
ResponderEliminarNo claro, en caso de ereader no tienes que pagar a las eléctricas ... solo tienes que pagar a la editorial, al autor, al librero, al transportista, al encuadernador ... claro no estás cogido ...
ResponderEliminarRespecto de su biblioteca puede sugerirle haga la mía a través de una estupenda iniciativa como esta :-) http://bookcrossingensevilla.blogspot.com.es/2012/03/zona-de-intercambio-en-alcala-de.html
Y para chafachorras decirle que eran autores con libros publicados en grandes editoriales, que si solo lo hacían por placer bien podían haberlos puestos en libre descarga
Sr. Castizo
ResponderEliminarLleva usted razón. Podrían haber hecho eso. Además me parece más inteligente, especialmente para quienes empiezan;: si eres bueno será rentable ates o después; si no lo eres dedícate a otra cosa. Al menos yo así me lo aplico y no me ha ido mal.