Mañana los españoles
estamos llamados a las urnas, para elegir a los que nos representarán en las
Cortes Generales (Congreso de los Diputados y Senado), en las elecciones más
abiertas desde hace muchos años, consecuencia de la irrupción (gracias al apoyo
de los medios de comunicación) de dos nuevas formaciones políticas, Ciudadanos
y Podemos, que han tomado protagonismo gracias a las encuestas, arrinconando a
otras formaciones como Izquierda Unida y UPyD que si cuentan con representación
parlamentaria, aunque no se haya tenido en cuenta.
Y hay una situación que
si veo positiva, el hecho de que los partidos políticos nacionalistas vayan a
perder peso en las decisiones de nuestro País, pues ahora, según parece, serán
cuatro las formaciones políticas con una representación nacional. Y serán esos
partidos políticos los que tengan que decidir sobre el futuro gobierno de
España.
Pero por otro lado hay
una situación negativa, que puede ser la “italianización de España”, tal y como
comentábamos hace unos meses en Desde el Caballo de las
Tendillas.
Y por eso, para evitar el
caos en el Congreso de los Diputados mañana votaré al Partido Popular, por eso
y porque es el partido político que más seguridad me transmite. Por eso y porque
no quiero que la izquierda vuelva a gobernar España, porque volverían a hundir
nuestra economía, con lo que eso conllevaría.
Y más me reafirmo en que
hay que votar al PP tras escuchar a Albert Rivera decir que si no son la lista
más votada se abstendrán en la investidura del que sea propuesto por Felipe VI,
por lo que se abre la puerta a un gobierno de izquierdas.
Pero lo mejor de todo es
que mañana todos tendremos la oportunidad de votar en libertad, de elegir la
opción política que queramos. Espero que el resultado sea positivo para España
y que nuestros futuros gobernantes actúen mirando por el bien de todos los
españoles.
Coincido en casi todo lo que dices, amigo Ángel y yo, por las mismas razones, también votaré al Partido Popular.
ResponderEliminarÚnicamente aporto un matiz por lo que escuche ayer de Albert Rivera que, si bien es cierto que dijo que "se abstendría si no son la lista más votada", también dijo que "votaría NO a una posible coalición de perdedores" porque si "España ya está mal, no se merecería estar peor". "Al César lo que es del César" y representa un pequeño hilo de esperanza.
Aunque, me temo, que unas nuevas elecciones generales están servidas más pronto que tarde.