Hoy recordamos en Desde
el Caballo de las Tendillas y hablamos de una exposición del Museo Reina Sofía,
en el que se mostraban mensajes contra la Iglesia Católica, hablamos de
radicales. ¡Feliz sábado!
Lo llaman arte, dicen que
es libertad de expresión, cuando para mí es todo lo contrario, me parece una
falta de respeto y un insulto hacia una gran parte de la sociedad. Un insulto
expuesto en un espacio público y, aunque sus autores lo nieguen, un claro llamamiento
a la violencia contra los que profesamos la religión católica.
Esto es lo que se puede
visitar estos días en el Museo Nacional Reina Sofía, la exposición “un saber
realmente útil” y hasta el próximo mes de febrero. Y es que esta exposición
incluye una obra del colectivo Mujeres Públicas, que representa una caja de cerillas
en la que aparece el lema “La única iglesia que ilumina es la que arde” y una
fotografía de una iglesia incendiada.
Ante la avalancha de
críticas el Museo Reina Sofía ha emitido un comunicado en el que dice que
respeta la libertad de expresión y la libertad de creación artística, de igual
modo que respeta todas las creencias y la libertad de opinión de las personas
que han sentido herida su sensibilidad. Pues nada, que lo que dice el Reina
Sofía lo diría cualquiera, y aprovechando que respetan la libertad de opinión
de las personas que han sentido herida su sensibilidad, pues ahí va la mía.
En mi opinión, exponer
esa caja de cerillas me parece una provocación y una falta de respeto y es un
insulto a todos los católicos, que somos muchos. Esa opinión, la de quemar las
Iglesias es la misma que tienen los integrantes del Estado Islámico. Y lo
curioso es que este grupo de mujeres tan progre y atrevido, con los del Estado
Islámico y demás islamistas radicales, que tratan a las mujeres como esclavas y
llegan a lapidarlas por un supuesto adulterio, guardan silencio, no se atreven
a criticarlos en sus “obras de arte”, vaya a ser que se enfaden. Claro, ellas
insultan a los cristianos, porque saben que, a lo sumo, tendrán alguna crítica
escrita, alguna manifestación y poco más. Y además nos podrán tachar de
intolerantes y radicales. Pero con los verdaderos radicales no se atreven.
Completamente de acuerdo con tu opinión, añadir que para el Reina Sofía se conoce que cualquier cosa es arte, incluyendo este mensaje que no solo hiere la sensibilidad de los católicos, sino que manifiestamente incita a la violencia, como si hubiera poca... Decepcionante e indignante.
ResponderEliminarSaludos.