Ayer
tuvo que ser un mal día para los separatistas catalanes, al menos para los que
todavía no son conscientes de que todo este rollo que se ha montado desde el
pasado 1 de octubre era eso, un rollo. Un rollo en el que han engañado a
muchos, un rollo que se han montado los líderes del ‘procés’ para vivir de
todos los que han sido embaucados en este asunto de la lucha por la libertad de
Cataluña. Y ayer volvían a reconocerlo, ayer el líder Puigdemont, decía que “otra
solución a la independencia es posible”, abriendo la puerta a cerrar eso del ‘procés’.
Y ayer un portavoz de ERC volvía a decir, porque ya se ha dicho, que no estaban
preparados para la independencia, reconociendo que han engañado a todos los que
han confiado en ellos.
Sí,
Carles Puigdemont, en una entrevista al diario belga ‘Le Soir’ decía que está
abierto al diálogo y que se podría buscar un acomodo para Cataluña dentro de
España. Y los de ERC ahora reconocen que no estaban preparados para asumir la
independencia de Cataluña. Sí, lo que estáis leyendo. Estos son los
separatistas catalanes, unos timadores que han engañado a millones de personas.
Unos
timadores que después de montar la que han montado, después de ilusionar, de
dañar y provocar peleas, después de romper familias, después de hacer creer a
muchos en la independencia, ahora van y nos dicen que todo era un cuento, que
todo era mentira, que no estaban preparados y que están dispuestos a buscar un
lugar de Cataluña dentro de España.
¿Y
para esto ha hecho falta la que han montado? Sí, claro, porque el objetivo no
era la “libertad” de Cataluña sino su propio interés, el de conseguir un
estatus, una posición y un poder político. Y les importa un bledo haber
engañado a tanta gente, porque ellos son unos timadores.
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