La pasada semana se celebraban elecciones en
Alemania, una cita electoral que volvían a ganar los demócratas cristianos, con
la actual Canciller, Angela Merkel, al frente. Y del proceso electoral alemán
me han llamado la atención varias cosas; en primer lugar que no se celebrara
día de reflexión, estando permitido pedir el voto para una formación incluso
durante el día de las elecciones; otro detalle que me sorprendió fue que la
misma noche electoral los candidatos de los principales partidos reunieran en
un debate televisivo, en el que debatieron y analizaron el futuro de Alemania y
de la Unión Europea tras las elecciones cebradas ese mismo día. Por último,
también me gustó que la oposición respete la voluntad de la mayoría y ni se
plantee unirse para impedir que gobierne Angela Merkel.
¿Sería esto posible en nuestro País? Me temo que no.
Para empezar no comprendo por qué en España seguimos manteniendo el día de
reflexión y por qué se prohíbe hacer públicas encuestas electorales días antes
de las elecciones. Hoy en día esto no tiene sentido, puesto que entre los
medios de comunicación, las redes sociales y demás, durante el día de reflexión
se sigue debatiendo y pidiendo el voto, aunque de forma indirecta. Igual ocurre
con la prohibición de publicar encuestas, más cuando esta puede ser salvada
publicándose en un medio de comunicación o una página web extranjera.
Más complicado es lo relativo a los debates
electorales. Si casi no se celebran debates en el periodo de campaña, ¿cómo se
va a celebrar un debate en la noche electoral? Yo al menos no me lo imagino. Y
es una pena, porque debatir, contrastar opiniones, ideas y proyectos es algo
muy importante y sano para la democracia.
Y si complicado es lo de los debates, imposible veo
lo de respetar la opinión de la mayoría. En Alemania, sin embargo, sí ocurre;
allí ni se pasa por la cabeza hacer una coalición de partidos para evitar que
un partido que se ha quedado a 5 escaños de la mayoría absoluta gobierne. Y no
tienen inconveniente en pactar entre la democracia cristiana y la social
democracia por el bien del País, como ha sucedido en pasadas legislaturas. Esto
en España es impensable. Aquí no veremos esto, porque los socialistas prefieren
pactar con todos, hasta con los independentistas, antes que apoyar a un
gobierno del PP.
Así nos va, a años luz de Alemania.
Hay muchas diferencias, Ángel. Y la mentalidad y actitud importan mucho y es la base de muchas de esas diferencias.
ResponderEliminarPor ejemplo, debido a la mentalidad y actitud, allí un ministro dimite por copiar en una tesis doctoral cuando era estudiante. Y, por mentalidad y actitud, aquí cualquier diputado se aferra a la silla a pesar de encontrarse implicado en cosas mucho más graves que copiar un texto académico.
Por mentalidad y actitud, a ningún alemán se le ocurre pensar que no es alemán (lo mismo pasa en EE.UU., Suecia o Francia, por poner más ejemplos). Y, por mentalidad y actitud, aquí tenemos unos cantamañanas que sí lo hacen imbuídos en un espíritu decimonónico y siguiendo dictados basadas en el falseamiento de su identidad histórica.
Por mentalidad y actitud, en Alemania son capaces, perfectamente capaces, de hacer alianzas parlamentarias guiados por el interés común y el superior sentido de Estado. Y, por mentalidad y actitud, aquí en España el sentido de Estado, la responsabilidad ante superiores intereses comunes, incluso el propio sentido común, hay que buscarlo con lupa ... y nada te garantiza que lo encuentres.
Etc., Ángel, etc.
Estoy de acuerdo Romero. Pero solo he querido hablar de estas tres cuestiones que me han llamado mucho la atención. Por supuesto en el tema de las dimisiones hay galaxias luz...
EliminarLo peor no es la forma, es el fondo, aquí se debate de Barcenas, de los ERE, de la independencia, de competencias administrativas y allí de empleo, de economía, de fabricar cosas... En Alemania un autónomo no paga nada hasta haber ganado un euro, aquí te cobran antes de empezar, es el fondo no las formas, las que nos pierden.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo, Temujin. Lo que indicas es cuestión de fondo.
EliminarLa mentalidad y actitud que yo apunté antes no las considero cuestiones de forma, sino de fondo.
Estoy de acuerdo con Romero Landa al decir que es cuestión de mentalidad y actitud. Pero eso debe de venir de nosotros. Allí un ministro dimite porque como no lo haga se queda sin votos, aquí sin embargo vuelve a salir con mayoría absoluta, vamos lo que yo llamo “Marca España”.
ResponderEliminarPor lo demás no creo que haya tanta diferencia entre los alemanes y los españoles. Ese país no va tan bien como lo pintan, allí también se dejan engañar como aquí. En ese país que tanto admiramos hay 1 de cada 5 alemanes al borde de la pobreza, solo hay que ponerlo en google y aparecerán muchos periódicos que lo han publicado. Pues los gobiernos que allí se han elegido gobiernan como aquí para beneficiar a una elite financiera, a costa de los ciudadanos.
Tristemente, estamos a años luz de un país como Alemania. Mientras tengamos actitudes y mentalidades como las que tenemos (coincido contigo Ángel en que son cuestiones de fondo), así nos irá.
ResponderEliminarPues sí, un saludo doll.
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