Los domingos recordamos
en Desde el Caballo de las Tendillas y coincidiendo con el final de liga os
traemos este artículo de abril de 2013 en el que hablábamos de un país dividido
por el fútbol y por otras muchas cosas… ¡Feliz día!
Esta semana hemos vivido
una situación curiosa. Con un País dividido en todos los ámbitos, el mundo del
fútbol no podía ser diferente, y es que en España la mayoría son del Barcelona
o del Real Madrid y no hay término medio. En un País donde el circo impera,
donde la información deportiva (de fútbol) en los telediarios supera en tiempo
al resto de la información, cuando el periódico más vendido es el Diario Marca
lo ocurrido con las derrotas del Barça y el Madrid debería haber sido un
desastre.
Y sin embargo no ha sido
así, la gente estaba contenta, estaban felices porque el eterno rival también
había perdido; da igual que mi equipo pierda, da igual que mi equipo
posiblemente no vaya a jugar la final de la Champions, porque el otro tampoco
lo hará, porque el otro también va a ser eliminado.
Vivimos en un País de
mediocres, vivimos en un País en el que la turba se vuelve mediocre. Por
separado, de forma individual somos muy competitivos, muchos hacen las cosas
muy bien, pero fallamos en el colectivo de País (salvo contadas excepciones) y
eso se demuestra en que nos conformamos, y somos felices, con las desgracias de
la otra parte, con las desgracias del vecino.
En vez de estar
decepcionados con la derrota de nuestro equipo estamos felices porque el rival
también ha sido derrotado, algo que da que pensar…
Y eso lo podemos llevar a
otros ámbitos. El y tú más impera en nuestra sociedad, el mal de muchos
consuelo de todos (o de tontos) se ha impuesto, y eso me preocupa. No nos
deberíamos conformar con el mal de muchos, al contrario, debería provocar la
reacción buscando cambiar esos males.
En la política, por
ejemplo, cuando se critica a algún partido por casos de corrupción rápidamente
salen de ese partido a echar en cara los casos de corrupción del otro.
¿Por qué no nos dejamos
de esas actitudes? Solo aparcando la mediocridad, solo aparcando el conformismo
ante nuestros problemas podremos salir de esta, ¿nos atrevemos?
Interesante artículo que deja claro uno de los grandes problemas de nuestra España: la llegada de los más mediocres a los primeros niveles de decisión y el desastre está servido porque el "axioma" no falla: "El mediocre se rodea de gente aún más mediocre para que sean manejables y no hagan sombra", lo que crea una espiral descendente de valor que sólo puede llevar al subsuelo.
ResponderEliminarY así nos va.
Empecé a colaborar con @DECDLT al año siguiente y, desde entonces, algunos artículos me has publicado en esa línea.
Feliz domingo, lectores.