Esta semana se ha
conocido la noticia del informe que ha emitido el Tribunal de Cuentas de la
Unión Europea que indica que la ampliación del aeropuerto de Córdoba se realizó
sin informes favorables que aconsejasen la millonaria inversión.
Y es que, según publicaba
El Día de Córdoba, las obras de ampliación del aeródromo cordobés ya han
supuesto un gasto de 85 millones de euros 13 de los cuales han sido soportados
por la Unión Europea, sobre un 40 % de obra ejecutada, por lo que el coste
total de la ampliación podría situarse en cerca de 170 millones de euros. Una auténtica
barbaridad.
En Desde el Caballo de
las Tendillas hemos hablado en varias ocasiones sobre el futuro
del aeropuerto de Córdoba, un despropósito que se lo hemos de agradecer, en
este caso al PSOE y a IU, puesto que fue Magdalena Álvarez, siendo Ministra de
Fomento, la que impulsó este proyecto, apoyada por Rosa Aguilar, en aquel
entonces en Izquierda Unida, siendo la Alcaldesa de Córdoba.
¿Y ahora quién responde
por este despropósito?, porque estamos en lo de siempre, una inversión inútil que
a los ciudadanos, con nuestros impuestos, nos ha costado una pasta. Con la de
cosas que se podrían haber hecho en nuestra Ciudad con los 85 millones de euros
que ya se han gastado en un aeropuerto vacío.
Pues ahora, los que aprobaron
este gasto se dedican a pedir explicaciones y a exigir a los actuales rectores
municipales a darle una solución al aeropuerto, olvidando que las competencias
en materia de turismo las tiene la Junta de Andalucía, que curiosamente ha
hecho muy poco por esta infraestructura.
Es curioso, pero en este
País el que despilfarra normalmente no responde pero, sin embargo, se dedica a
exigir y a pedir explicaciones, cuando son ellos los que deberían darlas. Lo
único que tengo claro es que después de gastarnos 85 millones de euros en un
aeropuerto en Córdoba seguimos (y seguiremos) viendo los aviones por el cielo.
No debería de haber aeropuerto en Córdoba. Pero incluso PP lo tenia como lema. De eso no se dice nada.
ResponderEliminarSi hubiera sido la única inversión mal realizada, con o sin informes.
ResponderEliminarPero el "café para todos" propició el despropósito acaparador de "todos tener de todo" (aeropuertos, universidades, palacios de congresos, puertos comerciales o deportivos, auditorios, polideportivos en pueblos sin juventud...) y la incapacidad profesional de la gran mayoría de los políticos mediocres y apoltronados hizo el resto.
Total, como "el dinero público no es de nadie" que dijo esa egabrense "sin lustre", que no ilustre, que nos "deslumbró" en su etapa de ministra de culturilla (todo con minúscula, porque no merece otra cosa su ínfima categoría) y, supongo, seguirá "deslumbrando" a los pobres alumnos de la Universidad de Córdoba que tengan la desgracia de sufrir sus clases, si las da en lugar de mítines adoctrinadores.