jueves, 10 de enero de 2013

O CAMBIAN LOS POLÍTICOS O LOS CAMBIAMOS LOS CIUDADANOS



Parece que la corrupción en este País está integrada en la casta, parece que el Sistema se alimenta de la corrupción política, sindical, empresarial…, parece que la corrupción lo inunda todo y llega a todos los niveles políticos y sociales.

Digo parece porque imagino que habrá excepciones y nunca me gusta generalizar.

Y lo último, lo que debería haber colmado el vaso de muchos españoles es la actitud de Unión Democrática de Cataluña, el partido político que forma la coalición CIU, junto a Convergencia Democrática de Cataluña y que Preside Josep Antoni Durán i Lleida, a la sazón Presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, un cargo que no es cosa menor, como diría el propio Rajoy.

Resulta que este caso, conocido como caso Pallerols, se dio a conocer en 1997, tratándose de una financiación irregular de Unión Democrática, a través del desvío de las subvenciones recibidas por las empresas controladas por el empresario Fidel Pallerols y su esposa para realizar cursos de formación laboral. Sobreseído provisionalmente en diciembre de 2005, fue reabierto por la Sección Décima de la Audiencia Provincial de Barcelona en noviembre de 2006.

Y resulta que esta semana debía iniciarse la vista oral del Juicio por este caso, pero se ha llegado a un acuerdo entre la acusación y los imputados, algo habitual en la práctica jurídica, es normal que se llegue a este tipo de acuerdos, por lo que al mismo no hay que ponerle ningún “pero” desde el punto de vista procesal, tal y como me indicaba ayer un reputado jurista vía Twitter. En estos acuerdos la acusación rebaja la petición de pena, a cambio de que el acusado reconozca su culpa, tal y como ha sucedido en este caso.

Y no se le podrá poner ningún “pero” desde el punto de vista jurídico, pero sí desde el punto de vista moral y político. El hecho de que un partido político como Unión Democrática de Cataluña reconozca que se ha financiado irregularmente, el hecho de que se reconozca actividades ilegales debería remover los pilares de este Estado de derecho, pero seguramente no pasará nada.

Y resulta que el Sr. Durán i Lleida dijo en el Diario El País, allá por el año 2000, que dimitiría si se demostraba que existió financiación ilegal en su Partido. Pues Sr. Durán, se ha demostrado, ustedes lo han reconocido y así va a ser recogido en una sentencia judicial, ¿a qué espera para dimitir?, debe cumplir con su palabra, como buen demócrata-cristiano que es.

Y decía que no pasará nada porque en España nunca pasa nada en relación con la corrupción política. Los ciudadanos lo permitimos todo, permitimos que la casta haga y deshaga, y callamos. Callamos y seguimos votando a los de siempre. Ha llegado el momento de pensar, de que los ciudadanos despertemos y nos demos cuenta de que esto debe cambiar. O cambian los partidos políticos o los cambiamos los ciudadanos.

5 comentarios :

  1. Los políticos que tenemos están aquí para quedarse. Están encantados con las listas cerradas, los privilegios y los gastos pagados. Aferrados al sillón, difícilmente encuentran ocasión o motivo para dimitir. Que se lo pregunten a Iñaki Anasagasti, por ejemplo, tantos años mamando teta del Estado mientras trata al mismo tiempo de dinamitarlo.

    Siempre, piensan ellos, les queda el socorrido recurso al "donde dije digo digo Diego", de lo que tú mismo has puesto como ejemplo al ínclito Duran i Lleida (menudo personaje).

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    1. Totalmente de acuerdo. Y la pena es que somos los ciudadanos los que lo permitimos. No hacemos nada, no valoramos otras opciones políticas. Ese es uno de los grandes problemas de este País.

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  2. Los políticos, nunca me gusta hablar de una casta de políticos, pues al igual que no todos piensan como yo o como Ángel, en todos sitios son iguales, hay diversidad de ideas y algunos sí que son buenos no los queremos.
    Si una casta de políticos corruptos es porque hay una casta de ciudadanos tontos que lo ponen, una y mil veces, hay claro ejemplos, no creo que haya que citarlos.
    ¿Por qué no empezamos a ponerle nombres a esos corruptos? Y de camino no lo votamos, eso es lo ideal.
    La corrupción en este país, estará mientras nosotros lo toleremos. Los políticos no cambiaran, porque son elegidos una y mil veces, es lo que quiere la gente.

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  3. Hay excepciones en la casta política, UN ANONIMO.

    Y son eso, excepciones.

    Cuando se habla en general no se habla de excepciones. Y (en general) la casta política actual merece poco respeto, la prueba está en el descontento social generalizado agravado por la crisis económica. Por descontentos no me refiero exclusivamente a los que son habituales de las manifestaciones, sino que también me refiero a una gran masa de ciudadanos que no van a ellas y no se hacen tan visibles, son más silenciosos, pero no por ello dejan de ser descontentos.

    Sin duda, los electores somos culpables porque votamos a los políticos. Pero, claro, si quiero votar PSOE, por ejemplo, he de hacerlo en una lista cerrada en la cual figuran dos personas que me inspiran el voto pero hay otras siete por las que siento asco , y entonces ¿qué hago? ¿Voto una lista del PP donde también hay siete impresentables y dos personas medio decentes? ¿A IU donde encuentro el mismo problema? ¿O es que, con tal de sentirme inocente, debo votar a una lista cerrada de desconocidos de una opción política de la que ignoro sus propuestas?

    Yo no quiero actuar así, pero no tengo opción. O voto a esas listas o voto en blanco. Los políticos son elegidos una y mil veces pero no necesariamente es lo que la gente quiere. Al menos no es lo que yo quiero; pero si he de votar no tengo otra que hacerlo a una lista donde hay más de un imbécil mezclado con unas personas desconocidas y algún otro merecedor de mi confianza. Estamos atrapados en la Ley Electoral que debería modificarse, pero ningún político toma la iniciativa. Porque no les conviene, especialmente a los nacionalistas.

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    1. ¿Cuántos casos de corrupción hay en los políticos, supera el 50%? Me imagino que al decir eso es porque lo supera. Creo que no llega al 1% no este dato del todo fiable pues tendría que asegurarme.
      No creo que con ese dato tan corto y pequeño pongamos a todos en el mismo camino. Esto es otra manera de desprestigiar la política, y todo lo que conlleva. Un gran discurso de la ultra derecha que entra tan bien en los ciudadanos como navaja de Albacete en barriga.
      Si detrás de cada caso de corrupción hay un empresario que da dinero para este político. ¿Por qué no ponemos a todos los empresarios como corruptos? Sería lo más lógico.
      Todo esto me recuerda a Franco cuando decía esto de hacer como yo no dedicarse a la política. Pero es más, yo creo que de esta estafa o crisis no salimos como sea con mucha política o con los políticos. ¿Hay otra manera de hacerlo?

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